«Es sólo una cortesana sin importancia» repetía
mientras rememoraba las noches ardientes en compañía de Ayesha. «Nadie se dará
cuenta si hago un desvío en la actual misión». Había conseguido las claves de administración
del ordenador de a bordo, borraría cualquier registro inculpatorio y mi amada
viviría. Introduje las coordenadas. Año: 323 a.c. En mis bolsillos varios botes
de pastillas de Hidroxicloroquina.
Le dije que ello la curaría las fiebres. Le dije cómo tomarlas. Insistí en que nadie más debía conocer la medicina. Partí con el deseo y la certeza de volver a amarla en pocos días.
El piloto
automático de la máquina del tiempo la aterrizó en la base. Al bajar todo me
resultaba extraño. Un funcionario se acercó saludando con un gesto desconocido.
Me costó entender lo que decía.
—Magnos días,
agente. Ciro Ahmadi te saluda.
«¿Griego
clásico?». Recordé mis años universitarios en París.
—¿Qué lugar es
este?
—Por la gloria
de Ayesha, cuál va a ser. Babilonia, la capital del mundo.
—¿A… Ayesha?
—El viaje ha
debido trastornarte, camarada. ¡La amada esposa de Alejandro, su salvadora!
Fui presa de un
temblor indescriptible. Me volví hacia mi nave. En el fuselaje, donde recordaba
la bandera de las barras y estrellas, se dibujaban ahora un escudo y la efigie
de un hombre de rostro altivo y cabello ondulado.
Punto Jonbar: Hay diversas teorías sobre la muerte prematura de Alejandro Magno, una de ellas sugiere que murió de malaria, hipótesis que se da como cierta en el relato. ¿Qué pasaría si Alejandro no muriese a los 32 años y hubiera consolidado y agrandado su imperio? ¿Cuál sería el mundo actual en el que viviríamos? Movido por el amor y la pasión, una decisión errónea y aparentemente intrascendente de un viajero en el tiempo al tratar de salvar a su amada, cortesana en la Persia contemporánea a Alejandro Magno, de la misma enfermedad, desencadena una serie de acontecimientos que lo devuelven a una realidad distinta de la que conocía.
Hola! Me parece muy original, creo que te ha quedado muy bien. Menudo shock del guardián del tiempo. Saludos!
ResponderEliminarMuchas gracias Ana y bienvenida al blog. Un saludo.
EliminarY todo por una mujer y una pastilla. En este caso el problema no fue que no se tomara la pastilla, sino por todo lo contrario, ja,ja,ja.
ResponderEliminarMuy bueno.
Un abrazo.
Creo que no fue buena idea introducir las pastillas tan pronto en la historia de la humanidad, Josep jaja. Un abrazo.
EliminarGenial, me ha encantado ese toque futurista, aunque me ha dado también mucha rabia porque yo había pensado hacer una ucronía también con Alejandro Magno. Al igual que tú, me pregunto qué habría pasado si no hubiera muerto tan joven.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Un abrazo.
Gracias Paloma. No veo problema en repetir personaje, al contrario, sería interesante ver como resuelves la misma situación. Me pasaré a leer lo que has publicado. Un abrazo.
EliminarGenial, Jorge. Una ucronía magnífica, tal cual. Te aplaudo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias Carmen, me alegra que te haya gustado. Un abrazo.
EliminarGenial, Jorge. Me ha encantado. Me ha gustado muchísimo el personaje que has elegido y la idea del viaje en el tiempo.
ResponderEliminarMuchas gracias Marta, me alegra que te haya gustado.
EliminarHola, Jorge. Regla número uno: no se puede alterar el pasado y menos introduciendo Hidroxicloroquina, aunque, claro, no vale para los Guardianes del Tiempo pero sí para los escritores como es el caso. No sé, pero a mí a priori no me disgusta cambiar las barras y estrellas por las de la Babilonia. Estupendo micro. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Isan. coincidimos en que el símbolo babilónico quedaría mucho mas bonito que las barras y estrellas, con todo lo que implica. Gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarMe gusta la hipótesis de la que partes ayudándote además de un sugerente guardián del tiempo, lo que hace de tu micro una original e interesante historia de ciencia ficción. También el giro final conduciendo la trama del futuro al pasado y las consecuencias tan imprevisibles para el protagonista me ha gustado mucho.
ResponderEliminarUn abrazo, Jorge.
Hola Estrella, intenté que la trama del viaje en el tiempo aportase algo de originalidad. Muchas gracias por tu comentario. Un abrazo.
EliminarMuy original y entretenido, Jorge. Buen relato y aportación. Un saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias, RR_misterio, un saludo.
EliminarHola, Jorge. Buen giro de la historia, cuanto antes se haga el injerto más efectivo será.
ResponderEliminarSaludos 🖐🏼
Gracias JM por comentar. Un saludo.
EliminarSe aprende mucho leyendo ucronias y tú te has lanzado a por todo un conquistador. Interesante y original tu propuesta. Enhorabuena
ResponderEliminarHola Matilde, demos las gracias a David que nos ha propuesto este reto. Saludos.
EliminarTe has movido en esta ocasión en las fronteras del pasado y futuro dando un salto cualitativo y cambiando radicalmente las circunstancias históricas. Privilegio de escritor, y nada más y nada menos que con el Gran Alejandro. Un CIFI retrospectivo.
ResponderEliminarMe encantaría haber conocido aquella, cuentan, maravillosa Babilonia.
Buen trabajo, Jorge. Un abrazo apretao.
Hola Isabel. Hablan maravillas de muchas ciudades antiguas y Babilonia es una de ellas. Ojalá tuviéramos una máquina del tiempo solo para verlas en su esplendor. Gracias por comentar. Un abrazo, canaria.
EliminarEl gran Alejandro ya cambió la historia conquista tras conquista. Si el destino no le hubiera sorprendido con esa muerte prematura nadie sabe hasta donde habría llegado.
ResponderEliminarMe suena tu micro a ese "caballo de troya" de JJ Benítez.
Un abrazo, compañero.
Hola Francisco. Si cambiamos Jerusalén por Babilonia y Jesús por Alejandro, casi tenemos una réplica, jeje. Gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarMira que no haber unas normas de conducta para tales viajes, porque vaya contrapartida hay si no. Genial aporte, Jorge, un punto jonbar a partir de una teoría de ciencia ficción pura, realemente una idea genial y muy bien llevada.
ResponderEliminarTe felicito.
Un abrazo!
Hola Pepe. Las normas se aplican hasta que llega el amor a romperlas. Me alegra que te haya gustado. Un abrazo.
EliminarComo aficionado a los relatos de viajes en el tiempo (la serie El Ministerio del Tiempo me tiene enganchado) se de buena tinta que el vuelo de una mariposa puede desencadenar un huracán, y en este caso todo un presente alternativo.
ResponderEliminarMuy buen relato Jorge. Reto superado, por supuesto.
Un abrazo.
Hola Bruno. Compartimos por lo que veo gusto por "El ministerio del tiempo", es también una de mis series de referencia, además de entretenida se aprende mucho. Un abrazo.
Eliminar¡Hola, Jorge! Fantástico micro en el que usas el viaje en el tiempo como vehículo del cambio de la realidad. Me gusta lo bien que te has documentado para enlazar en el relato los elementos necesarios para el punto Jonbar y para mostrar cómo sería nuestra realidad hoy día. Y es que un pequeño cambio, aunque sea bienintencionado, puede provocar cambios colosales con el transcurrir de los años. Magnífica ucronía y apunte histórico. Un placer contar con tus letras para este reto, Jorge. Un abrazo!!
ResponderEliminarHola David, procuro documentarme siempre cuando escribo sobre un tema histórico o científico, creo que es lo menos que se le debe a los lectores, aunque eso no quita que a veces se puedan cometer errores. Muchas gracias por tu comentario. Un abrazo!
Eliminar¡Fantástica ucronía, Jorge! Ha sido un placer pasarme por tu blog y leerla. ¡Felicidades! Un abrazo.
ResponderEliminarGracias Javier y bienvenido al blog. Un abrazo.
EliminarHola Jorge, jo, ba, vaya juego con el tiempo, brabo por ti. Babilonia y el Magno. Ese Ministerio, máquina o como se llame, podría funcionar más a menudo y borrar de un plumazo algunos acontecimientos que no deberían haber ocurridp. Un abrazote.
ResponderEliminarHola Emerencia. No se debe jugar con el tiempo jaja, mejor no tocar las cosas y dejarlas como están, no vaya a ser peor. Gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarHola, Jorge. En el sonido del trueno de Ray Bradbury, el hecho de pisar una mariposa en la época de los dinosaurios por parte de un cazador de nuestro tiempo hace que la historia de la humanidad cambie, por efecto del correspondiente "efecto mariposa". En tu estupendo micro la culpa es de un Guardián del Tiempo que intenta salvarle la vida a "una cortesana sin importancia". Cuestión de detalles, ¿verdad? Muy buen trabajo, compañero. ¡Un abrazo!
ResponderEliminarHola Beri. Leí el relato que mencionas de Bradbury siendo muy joven, y posiblemente haya tenido que ver en la inspiración de este relato. Gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarHola,Jorge! Pobre hombre! No solo perdió a su amada, también sufrió la decepción de que ella se fue con otro y nada menos que Alejandro Magno! Me encantó el relato. Muy original y bien construido. Un abrazo
ResponderEliminarHola Mirna. La verdad es que le salió al revés la jugada al pobre. Gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarHola, Jorge, me he quedado en shock como el guardián del tiempo. ¡Qué imaginación la tuya! Cómo se relacionan todos los datos para lograr ese fantástico final. Te felicito.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Pilar. Me alegra leer que te ha gusta la correlación de hechos. Muchas gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarHola Jorge
ResponderEliminarmuu particular tu micro, viaje en el tiempo, el gran Alejandro, pastillas y grandes amores.
Original. Me ha gustado
Abrazos
Hola Paola, me alegra que te haya gustado y te haya parecido original. Un abrazo.
EliminarHola Jorge, muy bueno tu micro y el punto jonbar, y ese guardián del tiempo con potestad para ver y no tocar, pero que por amor decide hacerlo..., un condimento genial para tu micro.
ResponderEliminarBuen desenlace de la semana.
Hola Idalia, ver y no tocar, yo no lo hubiera descrito mejor. Muchas gracias por comentar.
EliminarSaludos Jorge.
ResponderEliminarLa seducción de los viajes en el tiempo. Es muy atractiva tu ucronía y sutilizas un recurso muy utilizado en literatura fantástica, hay uno en especial él viajero imprudente” que ha ayudado a los astrofísicos a explicar de forma sencilla las posibles implicaciones teóricas de los viajes en el tiempo. En otras la paradoja del tiempo. El nombre de utilizado para la dama es magnífico, también era el nombre de la esposa favorita de Mahoma el profeta. Un abrazo.
Hola Alfredo. Agradezco los aportes históricos que tu comentario añade al relato. Los viajes en el tiempo tienen esa fascinación que nos lleva a pensar en la cantidad de implicaciones que pueden tener, sobre todo si se viaja al pasado. Gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarHola Jorge, me ha gustado mucho tu relato y como fusionas el viaje en el tiempo con la alteración crucial que se produce en el mundo antiguo. Menudo efecto mariposa espacio-temporal. Muy buen relato. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Carles, quería que hubiera una explicación o un motivo al cambio de relidad, y el viaje en el tiempo es la excusa perfecta. Muchas gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarHola!
ResponderEliminarUna excelente ucronía, Jorge, en escasas palabras nos revelas un hecho histórico que de seguro cambiaría muchas cosas viéndolas por separado. Me ha encantado esa mezcla de toque pasado y futurista y nada menos que con Alejandro Magno!
Un abrazo!
Hola Yessy. Alejandro fue sin duda un personaje fascinante, y su muerte no encierra pocos enigmas. Muchas gracias por tu comentario. Un abrazo.
EliminarWow un imperio euro asiático consolidado, justo antes de la formación de Roma de haber perdurado, este mundo sería radicalmente distinto, un punto jonbar genial, Jorge, y articulado con una historia de amor, de un guardián del tiempo, me ha encantado Bravo ¡¡¡
ResponderEliminarHola Mik Way. Probablemente el imperio Romano no hubiera existido como lo conocemos, o no hubiera existido simplemente. Los cambios en la historia de la humanidad hubieran sido muchos. Gracias por tu comentario. Un saludo.
EliminarMuy bien documentado este salto en el tiempo, de pasado al futuro en momento, así da gusto viajar por las entrañas de la historia de Alejandro Magno, que hubiera pasado si todo sucediese como en tu ucronía.
ResponderEliminarMuy interesante tu aporte al reto
Un abrazo
Puri
Hola Puri, en tan poco espacio no cabe mucha concreción, pero como suelo hacer he intentado documentarme lo mejor que he podido. Me alegra que te gustase, gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarMuy bueno tu micro, Jorge. Muy original. Gracias por tu responsable documentación.
ResponderEliminarHola Beba, me alegra que te gustase y te pareciese original. gracias por comentar. Saludos.
EliminarMuy original e interesante tu aportación. Felicidades.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Macondo. Un abrazo.
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