Debo
concentrarme, en las entrañas de esta cueva plagada de trampas y pasadizos, un
error puede ser fatal. Desempolvo el frontal del nicho y tiro fuerte de la
anilla; apenas creo lo que ven mis ojos: Un Tintero de Oro con la leyenda pídeme
un deseo y lo verás por escrito.
Bueno, por escrito, lo que es por escrito… pero ¡qué diablos! No tengo nada que perder.
Demasiado
tarde me doy cuenta de que mi impulsividad me ha vuelto a jugar una mala
pasada. Esta vez, puede que definitiva. El suelo comienza a temblar y
amenazantes cascotes se desprenden del techo. Con el temple y la resignación que
otorgan los años de oficio, giro el Tintero y leo el reverso. Inevitablemente,
siempre hay un precio a pagar: pero me harás compañía por toda la eternidad.
Sonrío, hay
que ser pragmáticos. Al menos ahora tengo la seguridad de que mi sueño se hará
realidad, aun cuando solo pueda disfrutarlo desde la otra orilla del Estigia. ¡Mis
aventuras, mi vida entera, plasmada para el gran público!
En pleno
éxtasis, el grito desesperado de mi joven aprendiz me saca del ensimismamiento:
—¡La losa se
cierra, corre, por lo que más quieras! ¡Indi, corre!
No muevo un dedo.
Hollywood ¡Allá voy!
Muy buen relato Jorge,
ResponderEliminarEse final "estilo Indiana Jones" ha sido genial. Buena aportación al reto.
Un abrazo!
Gracias Antonio, me alegro que te sorprendiese el giro final. Un abrazo.
EliminarMuy bueno.
ResponderEliminarGracias Anxela.
EliminarEstupendo relato con un final muy bueno. Te evoca a las películas de Indiana Jones bravo. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Nuria, Indi es omnipresente Un abrazo.
EliminarHola Jorge, basado en Indiana Jones, un éxito de taquilla y un éxito el libro que tu protagonista está escribiendo, muy bueno.
ResponderEliminarUn abrazo. :)
Hola Merche, eso es lo que desea Indi, ser famoso en la gran pantalla. Un abrazo.
EliminarHola Jorge.
ResponderEliminarPensándolo bien, entiendo a Indi. Lograr que sus aventuras sean vistas por todo el planeta una y millones de veces, bien vale una muerte. Total, ya estaba aburrido de tanto escribir y ser una eminencia. Ja Ja!
Un abrazo de Marlen
Hola Marlen, si es que la monotonía nos mata, y al mismísimo Indiana Jones también. Un abrazo.
EliminarEl precio de la gloria... :). Qué visión más novedosa le has dado a este tintero. Me ha gustado y me ha hecho sonreír :)
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Maite. Fue lo que evocó el Tintero, un descubrimiento arqueológico de primer nivel, y a partir de ahí vino lo demás. Un abrazo.
Eliminar¡Qué bueno, Jorge! El final es tremendo, totalmente inesperado y hace soltar la carcajada. Me ha encantado.
ResponderEliminarHola Marta, me alegro de haberte hecho reír. Un abrazo.
Eliminar¡Hola, Jorge! Estupendo relato cinematográfico. Ya de entrada, nos muestra una novedad: un escritor famoso y aburrido de escribir, por lo que sus anhelos van a ser otros más allá de la búsqueda de la inspiración: el salto a la gran pantalla.
ResponderEliminarEste deseo se describe como una gran metáfora en forma de película de acción y el desenlace expresa que el autor sabe que se cumplirá de forma póstuma, lo que está muy bien transmitido con la eterna compañía que deberá hacerle al tintero (muy simbólico), la mención de la laguna Estigia y esa losa que se cierra al grito de "Hollywood, Allá voy. "
Un enfoque muy original. Gracias por participar en el reto.
Un abrazo.
Hola M.A., el pobre Indiana estaba cansado ya de escribir libros, quería algo más. El precio a pagar parece que lo consideró justo. Un abrazo.
EliminarFantástico, Jorge. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias Carmen, un abrazo.
EliminarHay quien para conseguir la inmortalidad son capaces de todo.je, je.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Josep, creo que Indi quedó contento, después de todo ahora es toda una eminencia cinematográfica. Un abrazo.
EliminarHola, Jorge.
ResponderEliminarUna estupenda variación al reto. Hablando de reliquias doradas tenía que aparecer el Dr. Jones. Lo que no sabemos es si la historia comienza o termina, como para Mr. Ford.
Un tintero para la inmortalidad, pero no en los libros, sino en las pantallas. Bien visto.
Muchas gracias.
Un Abrazo.
Hola Jose Antonio. Quería darle un punto de vista diferente al estrictamente propuesto en el reto. Todo esto ha sido posible gracias a la unión de los dos retos, el Vade Reto que promueves y el Tintero de Oro, una gran inciativa. Un abrazo.
Eliminar¡Hola Jorge! No esperaba para nada ese final con la aparición estelar de Indi. Me ha gustado mucho la descripción de ese escritor, apático y desencantado con la vida, al que ya le da igual publicar un libro más o menos.
ResponderEliminarMuy original tu aportación y con un guiño final muy divertido.
Un saludo.
Hola Rocío. Me alegro de haberte sorprendido. Espero también haber resultado original. Un abrazo.
Eliminar¡Hola Jorge! .¡..con ser un aventurero! Y nada menos que Indiana. La verdad que estos tesoros dorados tienen un gran magnetismo en sí además de ser muy codiciados. Y claro, ellos tan pletóricos de leyendas. Un abrazo
ResponderEliminarHola Emerencia. Muy codiciados y muy traicioneros, por lo visto, aunque eficaces. Un abrazo.
EliminarGenial la ambientación! A mitad del relato tengo que confesar que me ha recordado a un aventurero como Indiana Jones, al final he podido comprobar que así era! En este caso, el tintero pringa con él no? Ja, ja! Eso le pasa al tintero por perverso! Un abrazote!
ResponderEliminarHola Marifelita. Más bien él pringa con el Tintero jeje. Un abrazo.
EliminarUna original y magnífica aportación al reto, como no podía ser de otra forma. Muchas felicidades.
ResponderEliminarUn abrazo.
gracias Chema. Un abrazo para ti también.
EliminarRealmente muy bueno Jorge, enorme el precio que tuvo que pagar.
ResponderEliminarUn abrazo.
PATRICIA F.
Gracias Patricia, un abrazo.
EliminarOtra secuela de Idiana Jones. Trepidante y muy original.
ResponderEliminarHola Cristina. Es una saga interminable. Un abrazo.
EliminarY Le salió bien, bueno al menos el duende cumplió, porque todos sabemos de quien hablas.
ResponderEliminarMuy original propuesta, introduciendo un deseo que no es escribir; le sirvió a Harrison para actuar . toda una saga, un duende generoso sin duda.
aBrazoo, Jorge!!
Hola Gabiliante. Si, Harrison estará feliz de que Indi haya pedido su deseo. Un abrazo.
EliminarHola Jorge, que buena aventura mezclar a Indi y el Tintero. Felicidades. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias Ainhoa, un abrazo.
Eliminar¡Hola, Jorge! Te prometo, palabrita del niño jesús, que al leer tu descripción de esa cueva llena de trampas me vino a la mente la mítica escena inicial de En busca del Arca Perdida, a la que siguió la escena final de La última cruzada, cuando se mostraba que el Santo Grial solo tenía poder en el interior de Petra. Así que cuando llegué al final me has sacado una enorme sonrisa al comprobar que los tiros iban por ahí. Un fantástico micro con el que participas dándole un giro de tuerca al reto. Sin duda, para los apasionados a Indiana Jones como yo, bien valió la pena ese sacrificio. Un abrazo!!
ResponderEliminarHola David. Es que tu eres un lector avanzado jajaja. A mi es que eso de un tintero mágico me inspiraba algún misterio arqueológico, asi que salio esto. Un abrazo.
EliminarUn reto que has convertido en toda una escena cinematográfica. Lo de la Academia de Ciencias me ha hecho pensar que no todo iba a ser lo que parecía, pero no esperaba que fuera Indiana Jones, jejeje, me ha encantado, que para eso soy muy fan de la saga. Enhorabuena. Saludos!
ResponderEliminarHola M.T., efectivamente, en este blog las cosas no suelen ser lo que parecen. Gracias por comentar. Un saludo.
EliminarInteresante giro argumental. Resultó ser Indiana Jones, uno de los más memorables personajes.
ResponderEliminarMuy bien contado. Saludos.
Hola Demiurgo. Conocido si que es el personaje. Un abrazo.
EliminarMuy bueno esa versión del Indiana Jones, con ese final que nos hace pensar que las cosas no le son del todo propicias.
ResponderEliminarUn abrazo Jorge
Puri
Hola Puri, le serán o no propicias dependiendo de sus aspiraciones, y descontento creo que no quedó jaja. Un abrazo.
Eliminar¡Jajaja muy buena, Jorge! Y muy original está aventura hollywoodense del tintero conectado a la
ResponderEliminarGran Pantalla y a la Arqueología. Un abrazo.
Hola Myriam. Me alegra que te haya resultado original, eso pretendía. Un abrazo.
EliminarUn relato muy original con un final que sorprende y arranca una sonrisa. Enhorabuena por un gran relato para el reto conjunto. Saludos.
ResponderEliminarHola Ana, todo aquello que arranca una sonrisa no puede ser malo. Un abrazo.
EliminarUna propuesta muy original, aburrido de escribir va en busca de más emocionantes aventuras. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Ester, me alegro que te gustase. Abrazos.
EliminarPor fin llegué a tu relato, Jorge, de un hombre que lo ha probado todo, incluído el éxito y los sinsabores del ocaso a la búsqueda de la aventura final, un excavador de... no sé si a la búsqueda del tiempo perdido, pero sí a la de una última emoción hollywodiense (no sé si se escribe así)
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, amigo Jorge.
Hola Isabel, si es que cuando se ha tenido todo, ¿que mejor que la inmortalidad? Un abrazo.
EliminarPam parampan, pam param, jejeje. ¡Qué grande Indy! Y qué bien llevado el micro hasta ese final. Disfruté mucho leyéndote, Jorge. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Pedro, solo faltaba la banda sonora y tu la has puesto. Un abrazo.
EliminarOriginal y divertido. Muy bueno! Saludos
ResponderEliminarHola Lulita, gracias, saludos!
EliminarVaya giro final más retorcido, Jorge, para nada me lo esperaba. Está muy conseguido porque juegas con esas dobles intenciones, creemos que es un escritor frustrado durante todo el relato y ese última frase cambia el concepto de todo lo leído. La segunda lectura es obligada para deleitarse con ese doble juego. Bravo!
ResponderEliminarFelicidades y un fuerte abrazo, compañero!
Hola Pepe. Pues ya ves, hay quien se lo esperaba y quien no, me alegro de contarte entre los segundos. Un abrazo!
EliminarGenial relato, Jorge.
ResponderEliminarY ese giro final te ha quedado de película.
Un fuerte abrazo.
Gracias estrella, nunca mejor dicho. Un abrazo.
EliminarHola, Jorge. Esta vez me lo pusiste a huevo metiéndome en la historia desde la primera frase, al hacer tu micro en modo guion cinematográfico, que para peliculero yo 😂 Aunque tu Indy, el verdadero, y no el del cine con trampa y cartón, cumple mejor con los cánones de genio o erudito despistado; hasta en el mismo abismo se pone de palique con Las Musas.
ResponderEliminarSaludos.
Hola Vanjav. Es que los genios son raros, es condición necesaria, aunque no suficiente. Un abrazo.
EliminarJajaja, muyy bueno, Jorge!! Me ha encantado conocer el secreto de Indiana. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Lola, pero shhhh no se lo cuentes a nadie. Un abrazo.
EliminarGenial la idea que has tenido para desarrollar el reto. Con un final inesperado incluido.
ResponderEliminarSaludos
Muchas gracias Jose. Un abrazo.
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