miércoles, 24 de enero de 2018

Niña de ojos tristes

Contemplas el mundo, niña de los ojos tristes, a través de esos cristales enmarcados en una montura dorada. Un mundo que ha cambiado desde la última vez en que pudiste aventurarte por sus confusos senderos. O quizás no haya cambiado tanto, pero a ti te lo parece.

Respiras de nuevo el aire entumecido con el rancio humo de los tubos de escape, mas esa atmósfera viciada te sabe a libertad en los pulmones. Hace calor, el verano resplandece exhibiendo sus mejores galas y sudas bajo tus amplios ropajes.

Pronto verás de nuevo rostros familiares, lo poco que todavía te mantiene apegada a ese mundo del que hace años desertaste. Pero no sueñes demasiado, niña de triste mirada, pues ni ellos ni sus vidas forman ya parte de la tuya.

La brisa azota tu rostro y sientes su frescura olvidada, los rosales de un parque escupen una fragancia que te quema las entrañas y la memoria se retrae a esa niñez en la cual te estaba permitido volar. Únicamente la soledad acompaña tus pasos y los sentidos adormecidos se desperezan.

Ahora más que nunca añoras conocer el tacto del agua de mar bañándote el cuerpo, echas de menos las caricias de ese sol al que algún día prohibieron posarse sobre tu piel descolorida, fantaseas con que un viento racheado juegue a despeinar tu cabello prematuramente encanecido y en secreto, como ocultándolo a tu yo más consciente, te preguntas a qué sabe un beso.

¿Quién te robó la infancia, niña de los ojos tristes, cuando el tiempo te acariciaba con sus alas más despacio?

Recuerdas aquellos días en los que siendo una chiquilla llenabas cartas suplicantes implorando por el rescate de un cautiverio indeseado, solicitando que te devolvieran al lugar de donde nunca quisiste marchar. Mas esas misivas escritas con trazos de llanto jamás llegaron a su destino porque, tú lo sabes bien, alguien que no iba a vivir tu vida decidió por ti la vida que deberías vivir.

Ahora no dudas, pues la duda no forma parte de tu credo, al igual que la renuncia a lo que eres es la columna vertebral sobre la cual se sustenta tu persona. Aceptas con resignación el destino para el que has nacido, pues tu sino estaba escrito en las estrellas, vocación ineludible grabada a fuego en tu alma todavía nonata.

Más de medio siglo cargas ya a tus espaldas, pero todavía un deje infantil te adorna la mirada. La misma expresión que has contemplado tantas veces en los rostros de aquellos ancianos a los que cuidas a tiempo completo, quienes conocedores de la cercanía de su deceso parecen volver en su fuero interno de nuevo a la niñez. Su sonrisa agradecida es el único salario que recibes y no dejas de preguntarte cuantas vivencias atesoran tras esos ojos desangelados.

Dos semanas pasan pronto, cuatro años son una eternidad. Las oscuras paredes que enclaustran tu existencia nuevamente te reclaman. Te levantas con el alba, amiga inseparable que cada mañana acompaña tu rutina, mientras vistes un cuerpo enjuto con el hábito tan negro como las perlas que adornan las cuencas de tus ojos. El monótono ronroneo de los maitines te prepara para la larga jornada que te aguarda, símil descarnado de esa letanía de días tan iguales que deben haber sido alumbrados en un mismo parto. 

Al fin la noche te arropa con su manto de sosiego. La soledad de tu celda es lo único que tienes, pequeño reducto en el que se atrinchera tu privacidad. Adelgazas unos gramos cuando despojas tu figura de sus negras vestimentas y te refugias bajo las sábanas frías. Cierras los ojos y tus sueños se vuelven de colores, correteas de nuevo por aquellos campos que antaño te alfombraban la infancia y el viento trota a tu vera como entonces. Vuelves a ser la chiquilla que eras, entre la nebulosa de tus recuerdos no deja de dibujarse una pregunta tan repetida como las cuentas del rosario que antes de dormir se te escurre entre los dedos.

¿Quién te ha robado, niña de triste mirada, quién te ha robado la niñez, cuando el tiempo te acariciaba con sus alas más despacio?




78 comentarios:

  1. Hola Jorge. Mira, déjame decirte que este relato es fascinante. Tú ya sabes qué es lo que me gusta y lo que no me gusta tanto, así que te imaginas que esta historia cubre todas mis expectativas y más. Desde el principio lo intuí porque la combinación de la narración en segunda persona con el lenguaje matizado con esos delicados toques retóricos me fue envolviendo en la atmósfera de tu protagonista. Más aún, creo que logras ir dibujando toda su vida interior en ese repaso de recuerdos de la infancia que tiene esa niña de ojos tristes. Una belleza de relato. Mis felicitaciones y mucha suerte en el concurso del tintero. Un abrazo.
    Ariel

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    1. A estas alturas Ariel ya nos vamos conociendo y sí, ya se lo que te gusta y lo que no te gusta tanto. Y se que este es el tipo de relato que te gusta leer, porque además tienes una sensibilidad especial para captar el sentimiento de un relato. Gracias por tu generoso comentario y por supuesto suerte también en el Tintero de Oro. Un abrazo.

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  2. ¡Una monja! Estaba haciéndome cábalas sobre qué le pasaba a la protagonista: un secuestro, un largo coma profundo, y no sé cuántas cosas más se me pasaron por la cabeza. Pero no, la juventud y la vida se pueden robar de otras maneras más sutiles y más crueles, como seguir una vocación que no se siente.
    Estupendo relato lleno de poesía y un buen homenaje para todos aquellos que sufrieron la imposición de una forma de vida no deseada.
    He visto por Facebook que presentas este relato al Tintero, así que te deseo la mejor de las suertes.
    Un beso, Jorge.

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    1. Lo de la enfermedad me lo han dicho más de una vez respecto a este cuento, pues es un relato que ya tiene un tiempo. Es un escrito un poco críptico, espero que se entienda bien lo que he querido expresar al meterme en la piel de la monjita. Aunque la interpretación de los pensamientos de la protagonista es propia, los hechos tal como se cuentan son reales, estas cosas han pasado y probablemente pasen todavía. Gracias por tus deseos Paloma. Besos.

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  3. Permíteme que insista, Jorge: eres bueno. Este es uno de esos relatos que lees al menos un par de veces. Y eso ya es muy significativo. Primero lo lees deprisa, porque la intriga conseguida en la narración te empuja a querer saber cuanto antes el misterio de la misma. Y luego lo lees despacio, para paladear a gusto la magnífica prosa y cada uno de los detalles. Además, abordas el tema con tal delicadeza y seguridad, que los sentimientos de la monja se nos hacen, no solo reales, sino tan cercanos que se pueden tocar. Tan cercanos como esa "mirada de ojos tristes"
    Te felicito, compañero. Muy buen texto que merece estar en el podio de los mejores
    Un fuerte abrazo

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    1. Pues es un honor que digas que lo has leído más de una vez, aunque eso puede ocurrir por dos motivos, porque gusta o porque no se entiende jeje, por lo que dices tu caso parece que es más bien el primero. Como le decía a Paloma, lo que siente la monja es de mi invención tratando de ponerme a en su situación, pero los hechos en sí son reales y los conozco de cerca, incluso la convicción de que con ellas hicieron lo que debían hacer pues estaban llamadas a ello por la divinidad, justificando incluso el hecho de que les leyeran la correspondencia y decidieran si debía partir o no hacia su destino. Supongo que llega un momento en que o rompes con todo o te sometes, pues el término medio sería insoportable.
      Gracias por comentar Isidoro, y a ver si te decides a participar en alguna de las iniciativas de David. Un abrazo.

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  4. Qué sorpresa me he llevado yo también. No he sido capaz de imaginar qué le pasaba. Y lo único que le pasa es producto de una forma elegida de vida.
    Me ha encantado que todavía tenga un deje infantil que adorna su mirada.

    Por lo demás, muy bien narrado, ¡suerte en el concurso El Tintero de Oro, Jorge!

    Saludos

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    1. Esa era la idea Chelo, no desvelar la sorpresa hasta casi el final, espero que el misterio no haya resultado demasiado enfarragoso. Respecto a lo de la forma "elegida de vida" en el relato he intentado jugar con ese concepto, desde el convencimiento de la protagonista de que ese es su destino pero la convicción íntima de que esa imposición le ha robado algo muy suyo. Gracias por pasar y un saludo.

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  5. Jorge, qué buena historia. La he leído dos veces , la primera un poco desconcertada por que no llegaba a entender bien que le pasaba a esa niña de mirada triste. Al saber el final y supe que era la vida de una monja comprendí que sólo una monja puede vivir esa vida de entrega. Por supuesto que ese recuerdo de niña es lo que le queda de la vida anterior antes de su entrega a adorar la vida del divino. Me ha encantado la forma que has tratado este relato. Bueno como todos siempre los bordas, eres muy bueno escribiendo. Y por eso creo que te llevarás un buen puesto en este concurso. No te digo suerte, ya la tienes. Un abrazo

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    1. Bueno el relato va dejando pistas poco a poco, aunque no se lo claras que podrán ser para vosotros los lectores, hasta ahora nadie me ha dicho que descubrió la identidad del personaje antes de tiempo jaja, así que muy claras no han de ser. Muchas gracias por tus generosos halagos Mari Carmen. Un abrazo.

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  6. Hola Jorge una historia con una carga emotiva enorme. Una prosa que danza entre sentimientos y recuerdos, alegrías y penas, libertad y cautividad, una prosa que es poesía cuando se abre la ventana de esta alma de monja. Un abrazo

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    1. Un poco contradictoria si que es esta monjita, Eme. Gracias por pasar y comentar. Un abrazo.

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  7. Hola Jorge como para otros compañeros, para mi también ha sido una sorpresa que no esperaba. La intriga y mi impaciencia me ha hecho perder concentración porque estaba más pendiente de resolver el misterio que de disfrutar con la lectura y he entendido esas dos lecturas que te comentaba Isidoro.

    El relato me ha parecido muy poético, muy intimo, muy delicado, ideal para esa conversación interior.
    Me gusta que tu protagonista conserve aún a esa niña o niño que todos llevamos dentro y entiendo sus ojos tristes y qué triste que pasaran estos hechos y que se impusieran vidas.
    Mucha suerte en el concurso.
    Besos

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    1. Fíjate Conxita que yo no me había planteado que pudiera haber intriga en este relato pero ya va más de un comentario en ese sentido.
      Por desgracia la imposición de unos modos de vida es algo que todos sufrimos incluso sin darnos cuenta, todo está orientado a que nos comportemos según unos estándares determinados, pero en algunos casos roza lo esperpéntico y esa es también la denuncia que quería hacer.
      Gracias por comentar Conxita. Un beso.

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  8. Bellísimo. Poético, emotivo y muy delicado. Me ha encantado, Jorge.

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  9. Bonita forma de narrar, Jorge, y toda una sorpresa que la protagonista sea monja. Transmites muy bien los sentimientos de alguien a quien se le ha robado la vida y la alegría de la mirada. Me ha gustado. ¡Mucha suerte en el concurso! Un abrazo.

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    1. La sorpresa siempre forma parte esencial de un relato, Pilar. Muchas gracias por comentar. Abrazos.

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  10. Al margen de lo que cuenta el relato, la historia podía ser una metáfora de los sueños frustrados, cómo la vida va envolviendo a algunas personas hasta enclaustrarlas en una dinámica que no tiene nada que ver con los sueños iniciales. Me gusta mucho cómo das a entender el paso de los años sin que la pobre monja deje de ser una niña a pesar de llegar a la madurez. Y la sensibilidad con la que está escrito. Enhorabuena y mucha suerte

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    1. Todos llevamos un niño dentro, y que así siga siendo. También es cierto que ciertos ambientes no son los más adecuados para madurar. Gracias Ana por comentar. Se te echa de menos en el Tintero, a ver si te animas. Besos.

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    2. Estoy de acuerdo contigo Ana, metáfora de sueños frustrados.

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  11. Hola Jorge, acabo de leer tu relato, el título ya presagiaba la tristeza de la protagonista. Con tu bella prosa llevas al lector por el acontecer de la vida de esa niña, que ya no lo es. Para desvelar a medida que avanza la lectura que se trata de un destino impuesto..Hermoso relato. te dejo mi abrazo y mucha suerte en el concurso.

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    1. ciertamente con 11-12 años no se puede escoger un destino, por lo que dices bien, necesariamente ha de ser impuesto en esas circunstancias. Gracias por pasar Mirta. Un abrazo.

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  12. Hola Jorge
    Una encantadora historia, muy emotiva y poética. Llegué a pensar que era una chica secuestrada por dinero, pero el final es un giro sorprendente. Muy bien narrado, un trabajo maravilloso. !Suerte en el concurso!
    Saludo!

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    1. Pues tu hipótesis se añade a la lista de suposiciones que me vais dejando por aquí, Yessy. Ya ves que era algo menos misterioso y más mundano. Gracias por comentar. Un saludo.

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  13. Hola, Jorge, me llamó en su día la atención este texto, imagino que por el título, y de ahí que lo leyera de cabeza, porque es una historia que conmueve. Te deseo suerte en el concurso. Un abrazo :)

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    1. Sí Eva, en la publicación anterior fuiste de las pocas lecturas que tuvo, por aquel entonces (cuando lo publiqué) estaba empezando el blog y apenas tenía visitas, aunque tu lectura fue posterior. Gracias por comentar, abrazos.

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  14. Gracias, Jorge, por participar con este relato en EL TINTERO DE ORO. Un abrazo y suerte!!

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  15. Como en la letra de Sabina "no hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás sucedió", así imagino a esta monja sin vocación, rememorando su infancia y añorando esa libertad de la que nunca disfrutó, acompañada de la soledad y la melancolía. El brillo de la inocencia infantil y la tristeza de una vida perdida se han quedado prendados en sus ojos, desde los que contempla el mundo con esa mirada triste enmarcada en oro. Relato ganador, como siempre los tuyos. Suerte en el concurso y felicidades por tu excelente prosa poética. Un abrazo.

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    1. Curioso eso que dices de la vocación Jose, yo siempre me he preguntado si la renuncia a uno mismo y a interactuar con la sociedad y enclaustrarse entre cuatro paredes, por no hablar de un trabajo de sol a sol sin remuneración alguna, puede considerarse así, al margen de creencias e ideologías. Muchas gracias por comentar Jose. Un abrazo.

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  16. Un relato muy hermoso en su forma y muy duro en su fondo, Jorge. Es terrible que alguien elija la vida que otro debe llevar, pero más aún si es una vida plagada de privaciones, austera, descolorida si no se acompaña de la vocación necesaria para encontrarle sentido. Esa "niña" de cincuenta años aún no ha olvidado vivencias y sensaciones que la hicieron feliz y que son su único tesoro.

    Ainssss me ha encantado, pero lo has escrito tan bien y has transmitido de una forma tan eficaz los sentimientos de la protagonista, que me has dejado hecha polvo. ¡Muy bueno!

    Un abrazo enorme y mucha suerte en el concurso :))

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    1. Pues me permitirás Julia que te diga que me alegro de haberte dejado un poco hecha polvo, porque eso quiere decir que el relato transmite algo y es lo mejor que se le puede decir a un escritor. gracias por tu comentario, un abrazo.

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  17. La niña que fue monja sin querer ser...
    No la rescataron y su vida fue un suplicio de espera.
    Triste historia, conmovedora, le arrebataron la vida a una niña inocente.

    Muy buen relato David, me gustó muchísimo, gracias.

    M.J.D

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    1. Tan omnipresente está nuestro anfitrión David que hasta se traspapelan los nombres jajaja. No te preocupes que me he dado cuenta, además de haberlo aclarado tú misma. Gracias por comentar María.

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  18. Perdón, me equivoque de nombre, felicidades Jorge Valin, lo siento.
    Saludos.

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  19. A mi me gusta cuando sacas el registro intimista porque no sueles asomarlo Jorge.
    Para empezar, está bien la indicación del medio siglo a la espalda, porque el tiempo es importante en este relato, actualmente sería casi imposible que se forzara una vocación religiosa. Antes, meter a los niños en seminarios era una forma de darles educación y sustento, sobre todo en ambientes rurales y humildes. Y ¡cuántas niñas sensibles se sintieron atraídas por esposarse con Cristo cuando un buen novio a tiempo les hubiera rebajado el misticismo!, (no es un comentario machista, era lo que había, y era, sobre todo, otros tiempos y circunstancias, así que es importante haberlo situado cronológicamente.
    Si meterse en la piel de una mujer, ya es difícil para un hombre, hacer creíble la voz, pensamiento y sentimientos de una niña con efecto reroactivo, una monja en pasado y presente, tiene el triple de dificultad. Yo creo que lo has conseguido, con cierta poesía, con un deje de lirismo, con belleza en muchas de las frases, con aire libertario (solo en los sueños) de una mujer enclaustrada por la religión, por los hábitos, por los muros, por la decisiones egoístas de los demás, por quienes le robaron la infancia y una vida.
    Un cariñoso abrazo Jorge.

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    1. mmmm no suelo asomarlo? tendré que hacerlo más a menudo entonces jeje... bromas aparte, me gusta cambiar de registros y de temas para no estar contando siempre lo mismo y no aburriros demasiado. Y de paso no aburrirme yo escribiendo, porque escribir siempre de lo mismo creo que sería muy aburrido.
      Fíjate que yo no pondría la mano en el fuego porque ese tipo de cosas no ocurran hoy en día, es más, conozco un caso cercano en que a pesar de que los estatutos de la orden no permitían el ingreso creo recordar que de menores de 16, se admitió con 14, con el consentimiento de la parte interesada es cierto, pero menor al fin y al cabo. Y podría hablarte de otra Orden de elevada presencia en este pais (y lo de elevada no va solo por número) donde no se permite el ingreso hasta la mayoria de edad pero se reclutan niños desde muy temprana edad en los centros donde se produce un claro adoctrinamiento (cilicios de por medio incluidos con menores de por medio implicados) y esto lo he visto con mis propios ojos. Que no se muestre públicamente no quiere decir que no exista. Respecto a lo que comentas de la educación habrá casos y casos, pero en el que nos ocupa y que ha inspirado este relato se trata de los hijos menores de una larga lista, nacidos ya en tiempos de relativa bonanza comparados con los primeros; más bien apunta a que asegurado el futuro con una prole numerosa, los más pequeños se daban en ofrenda al altísimo según la mentalidad de la época. No juzgaré a quienes así obraron pues los tenía en alta estima y eran efectivamente rehenes de una sociedad enclaustrada, pero la práctica en sí me parece abominable. Lo primero puede disculparse, lo segundo en mi opinión no ni aún con la pertinente relativización temporal. En fin que nos ponemos muy serios y me ha entrado la vena polemizadora jeje.
      No es fácil ponerse en la mente de otra persona, necesariamente aflora parte de nosotros en esa impostura, pero he tratado de hacerlo de la mejor manera posible y si realmente ha llegado me siento satisfecho.
      Gracias por comentar Isabel, sabes que tus impresiones son siempre de gran valor para mí. Espero no tardar en publicar de nuevo un relato intimista. Acaban de lanzar una nueva convocatoria del torneo de TR (que ya es mas de fuera de TR que otra cosa pero el nombre le ha quedado) donde el relato de la primera ronda va también en esa línea, así que en breve habrá algo, aunque me temo que para poder publicarlo habrá que esperar al menos uno o dos meses. Aprovecho para animarte a participar si lo deseas. Un beso.

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  20. ¿Una Orden que empieza por Opus y termina por Dei?:(
    Esto da para un largo debate Jorge.
    Te deseo suerte en el concurso de TR, creo que es casi lo único interesante de la Web, aún recuerdo la competitividad en el mal de los sentidos, las dobles y triples cuentas, los insultos, las mentiras... que aunque no fui atacada directamente, sí lo fueron algunos de mis compañeros, especialmente Alejandro Gallardo, compañero respetuoso, imaginativo escritor. Bueno... de TR saqué a colegas como tú, Ana, Ariel, Isidoro...
    Un beso Jorge, hasta pronto.

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    1. Bueno el torneo ya se mueve más por facebook que por la web de TR, de hecho ni entro en TR ya no se me pierde nada por allí. Por eso te digo que le queda el nombre y poco más :)

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  21. ¿Sabes qué pasa? que cuando me meto en un proyecto y el concurso de Tintero en cierta manera lo es, me meto a fondo, me gusta leeros con calma y comentar sacando sobre todo los aspectos positivos...y la verdad es que no tengo tiempo de mucho más. Gracias por la oferta Jorge :)

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  22. Una ronda de palabras, una poesía que no cesa para describir una historia, que en trazos muy delicados, da cuenta del personaje y sus vivencia, con absoluta claridad. Me encantó como lo has hecho.Antes de cerrar el comentario, lo he vuelto a leer. Sí, me encantó. Un fuerte abrazo y buena suerte!! Vivian (lapiazzadellaluna.blogspot.com.uy)

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    1. Ups que susto! por un momento pensé que los de Anonymous estaban atacando mi blog! si aquí no hay más que relatos y aunque en uno de un naufragio aparece un tesoro no iba a tocar a mucho entre tanto pirata. Gracias por comentar Vivian y suerte para ti también, abrazos.

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    2. jaja.... disculpa. Es que estaba con otra cuenta, y me pareció mejor así. Si hubiese sabido que traería consecuencias... ;) Gracias por tu buen humor.

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    3. jaja así con cara mejor, que ya no pareces tan peligrosa ;)

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  23. Hola Jorge

    Un relato muy particular que te atrapa desde el principio.
    Ha debido de ser un trabajo duro y meticuloso pero ha dado buen resultado.

    Suerte y saludos

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    1. Escribir tratando de hacer un buen trabajo (el conseguirlo ya es a juicio de quien lo lee) es siempre un trabajo duro, tú lo sabes bien Paola. Gracias por la visita. Un saludo.

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  24. Un relato muy melancólico. Reconozco que durante la lectura he dudado quién podría ser la protagonista y me ha sorprendido el final. Enhorabuena Jorge, te deseo mucha suerte en el concurso.

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    1. Pues si te ha sorprendido el final me alegro de ello Beita. Gracias por tus deseos. Un saludo.

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  25. Nada nuevo que añadir a lo que dicen los compañeros. Excelente relato y sorpresa al descubrir a la monja. Un abrazo.

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    1. Pues nada nuevo que responder Ana salvo agradecerte la visita y comentario, Un abrazo.

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  26. Bonito. No se por qué pero me he imaginado el relato hecho canción. No hay mucho más que decir prosa-poética que te engancha desde el principio y una protagonista con la que es muy fácil empatizar.

    Un abrazo.

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    1. Pues sí a la pobre monjita le deben de estar pitando mucho los oídos estos días de tanto que empatizan con ella. Gracias por tu visita David, abrazos.

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  27. Acabo de ver en el correo que el comentario del compañero Bruno Aguilar se ha perdido, lo reproduzco a continuación:

    Un relato enternecedor y terrible, Jorge. Como las cuentas de ese rosario que se le escurre entre los dedos a nuestra protagonista, has desgranado, con mucho arte y buen hacer, la vida no deseada de muchas personas. Podría ser el día a día de un secuestrado, de una mujer ataviada con burka en Afganistán o, como este caso, la de una monja sin vocación.
    Nos has engañado, bien lo sabes, pues nos das poco a poco las claves de la vida de esta "niña" obligándonos a pensar en un secuestro o una enfermedad, y lo has hecho como ya nos tienes acostumbrados, por lo que no sé si desearte suerte en el concurso, pues creo que poca falta te hace.
    Un abrazo enorme.

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    1. Cierto Bruno que podría ser la vida de muchas otras personas, es curioso como lo vemos enseguida cuando miramos otras culturas pero tendemos a cerrar los ojos cuando se trata de la nuestra.
      me alegro de haberos engañado aunque sea sólo un poco. Suerte para ti también, Bruno. Un abrazo.

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  28. Hola, amigo Jorge. Gracias, una vez más, por compartir con nosotros otro de tus excelentes escritos. Has ido dejándonos las pistas con elegancia y en el momento preciso para que gozáramos con esta triste historia, que me temo no es infrecuente, ni mucho menos. Enhorabuena por tus letras.
    Te deseo mucha suerte en el "Tintero".
    Un abrazo.

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    1. Gracias a ti Patxi por visitar mi blog y comentar. Quisiera creer que es infrecuente en nuestros días, pero querer no siempre es poder. Un abrazo.

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  29. Esta historia narrada tan perfectamente es el vivo retrato de muchas niñas que fueron absorbidas por la religión sin darle tiempo a decir que no. Algunas supieron luego salir a la luz para que esos ojos volvieran a ver otras cosas maravillosas.
    La forma en que lo cuentas es del todo triste como los ojos de esa niña.
    Un abrazo y suerte en el concurso Jorge.
    Puri

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    1. Era como dices Puri algo frecuente al menos en zonas rurales. Gracias por tus deseos. Un abrazo.

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  30. He leído con calma el relato y los comentarios aclaratorios . Me parece un acierto la voz narrativa con la segunda persona. Me parece un acierto porque es como un baluarte para la defensa del autor. Y es que resultaría duro y un pelín tramposo (permítaseme la expresión)para el lector la usurpación del personaje de una monja niña.
    Así y todo, a fuer de ser sincero, el punto de vista elegido, para expresar lo que parece ser que queda mejor expresado en los comentarios aclaratorios, no me resulta el más adecuado. Es como una renuncia a meterse en terrenos más áridos quizá pero más ricos en el terreno emocional aunque en principio parezca lo contrario.
    Quizá por eso, me resisto tanto a esa demora en "descubrir" ¿el qué?. Por los comentarios aclaratorios hay como un grito sordo pugnando por salir como una torrentera que se queda en un dulce arroyo de emoción edulcorada.
    Un buen relato, una buena anécdota, un buen conflicto dramático, pero tal vez un registro desviado. Todo , claro está, basado EMDO y en tus comentarios aclaratorios.
    Un abrazo y que "las puntuaciones te acompañen"

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    1. Hola Don, gracias por comentar y tomarte la molestia de analizar con detalle el relato.
      Creo que no es necesario aclararlo pero obviamente la segunda persona empleada no es más que una primera persona encubierta, es la propia protagonista quien se habla a sí misma desde algún lugar recóndito del subconsciente. Haber escogido la tercera persona hubiera resultado efectivamente en la usurpación de la protagonista por parte de un tercero, además de resultar una posición fría y distante. La primera persona hubiera trasladado el relato al plano consciente de la protagonista, eliminando el conflicto entre lo que es y lo que a otro nivel del subconsciente desearía ser.
      Aclarado esto, en primer lugar decir que los comentarios son simplemente eso, comentarios, en ningún modo aclaratorios pues un relato debe ser autosuficiente en cuanto a lo que transmite, si no es así algo falla del lado del autor, del lector, o de ambos. En segundo lugar no acabo de comprender bien la crítica, pues me parece entender que echas de menos una relación de los hechos más objetiva y concreta, lo que trasladaría el punto de vista a una tercera persona (narrador onminiscente que cuenta los hechos desde fuera) o una primera (narrador protagonista que es en todo momento consciente no sólo de los hechos sino de sus implicaciones y consecuencias), eliminando por completo en ambos casos la visión desde el plano subconsciente de la protagonista y por tanto dejando al lector sin acceso a sus miedos, sus traumas, sus anhelos escondidos en lo más profundo de su persona. El relato así contado hubiera sido otro, y acertado o no, no era eso lo que quería expresar, sino precisamente los hechos desde ese yo oculto de la monja, lo que necesariamente implica huir de un relato objetivo y pormenorizado.
      Obviamente hay tantas formas de ver un relato como lectores, por lo que la visión de todos vosotros es siempre enriquecedora y bienvenida. Un abrazo.

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  31. Hacía tiempo que no leía un relato tan poético como el tuyo, Jorge. Además muy bien creado. Es arte en estado puro. Una canción, un poema, un dejarse acunar por tus palabras.

    Me has hecho llegar muy hondo esos sentimientos que transmites en tu historia hecha canción. Y así llegan mejor las cosas, con ritmo y melodía.

    Me ha encantado, sí señor.

    Suerte en el concurso.

    Un abrazo.

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    1. Muchas gracias Jean, a veces hay que apoyarse en cierta forma de contar para tratar de transmitir, sobre todo en relatos que no tienen un hilo conductor, una trama, a los que les viene mejor este estilo en prosa poética. Me alegra que te haya gustado. Un abrazo.

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  32. Has sabido transmitir emociones de desconsuelo, frustración y soledad.
    Creo que tu forma de contar es muy sutil y poética.
    Suerte y mi abrazo.

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    1. Me alegra leer que el relato te ha transmitido esas sensaciones Francisco. Gracias por comentar. Un abrazo.

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  33. Hola, Jorge, los relatos en segunda persona son difíciles porque parece que se aleja al protagonista del lector. Es el narrador quién toma la voz y le interpreta o le increpa como suele hacer la conciencia sin que el personaje pueda decir nada en su descargo. En este caso nos has regalado un torrente de sentimientos que nos ha hecho ver y entender claramente a esa niña de ojos tristes. Sorprendes con el final, porque en estas épocas de mayor libertad no se concibe que a uno le obliguen a ser y hacer algo para lo que no tiene vocación. De todas formas, hoy en día, hay muchas personas que por desgracia tampoco pueden elegirla por numerosas circunstancias y se sienten atrapados igualmente en trabajos y situaciones que no desean. Elegir lo que unos quiere ser en la vida es un privilegio que no todos tienen. Mucha suerte en el concurso. Abrazos.

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    1. Hola Lana. En realidad la protagonista tiene ya sus años tal como se indica en el relato (más de 50 primaveras cargas ya a tus espaldas), así que los hechos que recuerda no están ambientados en la época actual pero sí el momento en que los recuerda. No obstante como he dejado caer en otro comentario yo he visto cosas muy parecidas a esa en época reciente, así que a mí no me sorprenden en absoluto. Gracias por comentar Lana, un abrazo.

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  34. Felicidades querido Jorge por el TINTERO DE PLATA y es una alegría compartir podium contigo y con el amigo Ariel. Muchos besos y enhorabuena.

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    1. Gracias Isabel, lo mismo digo, un placer compartir podio y enhorabuena también. Besos.

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  35. Enhorabuena Jorge, por el Tintero de Plata tan bien merecido. Un abrazo, desde la bruma de Gallaecia.

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    1. Gracias Carmen, creo que compartimos brumas, si. Un abrazo.

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  36. Hola Jorge! Mis felicitaciones por el premio. Me pone muy contento porque tu cuento estaba entre mis favoritos, pero no solo por eso, sino porque compartir esta futura antología contigo es un premio para mí porque tú eres de las primeras personas que me han alentado desde los tiempos en los que comencé a publicar en TR, y eso le da más valor a estos galardones.
    Ariel

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    1. Pues sí Ariel, parece que vamos a ser compañeros de antología, lo cual para mí también es un honor. Que tiempos aquellos los de TR, que llegó a juntar en un momento dado a grandes escritores en un mismo espacio. Ahora nos movemos por otros espacios virtuales y es muy grato que tres de los que por allí pululábamos hayamos coincidido en el mismo podium. Muchas gracias Ariel y un abrazo.

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  37. Enhorabuena por ese merecidísimo Tintero de Plata, Jorge. Que lo disfrutes mucho :)

    ¡Un abrazo!

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